José Manuel Gutierrez es de Málaga. Tuvo una gran conversión de pentecostal al protestantismo a descubrir la fe católica. Él fue bautizado como católico e hizo su primera comunión. Pero su familia era una fe más por tradición que por convicción. “Nuestra fe quedó en una fe de ocho años. Vamos haciendo un recorrido sólo de eventos religiosos”, explica.
Se producen diversos acontecimientos en su vida dónde se acerca a la iglesia. Fue en el 2010 cuando comienza esa búsqueda de Dios. Un amigo le regala dos Biblias, una de ellas la de Jerusalén y la otra Biblia era la más usada por los protestantes. “Las Escrituras las devoraba, me daba igual que la biblia fuera católica o protestante. Mi formación bíblica era nula pero yo buscaba a Dios a través de ahí”. Fue a raíz de unos problemas familiares que estuvo fuera de su casa, a su vuelta vió que su mujer estaba comenzando a ir a un culto pentecostal. “Esa iglesia pentecostal sigue estando abierta. Mi mujer me invitó un domingo y accedí de buena manera a ir al templo”. José Manuel se quedó desconcertado, no le vió ningún parecido a la iglesia que él había conocido. “Aquello era una nave industrial, no había pila bautismal ni nada parecido.
Cuando llegué todo eran cumplidos, besos, te dan la bienvenida, así es como operan las sectas”, comenta. Todo parecía normal hasta que comenzó el culto. “Había música a gran volumen, mucho ruido. Para mí era bastante extraño. Después vino la predicación de la pastora”, explica. Después de la predicación, todo eran gritos, voces, le extrañaba esa falta de sacralidad que había en la iglesia católica. Pasaron tres semanas de su ingreso y ese día había un gran evento. Lo que parecía ideal al rato no lo era tanto.
“En una oficina contigua se estaba celebrando una reunión entre pastores y discusiones en voz alta. Fue algo sorprendente”, recuerda. Al día siguiente, uno de los pastores les explicó que esa discusión fue por motivos económicos. Esa persona les comentó que iba a abrir otra iglesia. Parecía aparentemente más agradable y cercana. Todavía no tenían un local dónde reunirse. Esas reuniones las realizaban en los propios hogares dónde hacían lecturas de las Sagradas Escrituras. Por fin se instalaron en el nuevo local y asistían tres veces por semana. “Era en esas prédicas dónde tenía grandes interrogantes porque atacaba a la iglesia católica, a la Eucaristía y a la Virgen María. Esto me inspira a buscar la verdad. Necesitaba saber si lo que decía ese pastor era cierto o algo falso”. Así, por su propia cuenta empieza a investigar por su cuenta sobre la iglesia católica.
Comenzó a leer sobre San Ignacio de Antioquía entre otros. Y es que el culto pentecostal no daba importancia a la Eucaristía, era un simple recuerdo que lo observaban cada cierto tiempo cuando le parecía al pastor. En esos tiempos, le llegó el testimonio de Fernando Casanova que también fue pentecostal. “Ahí comencé a dudar de la predicación de nuestro pastor. Descubrí que por 2000 años había una doctrina que no había variado a lo largo del tiempo”, sostiene.
Puedes seguirle en sus canales de Youtube: https://www.youtube.com/@pater-noster
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