Andrés Castellano es de Argentina y se dedica a evangelizar a través de canciones de rap y también haciendo freestyle. Fue el primer rapero en compartir este estilo de música con el Santo Padre. Se crió en un pueblo que se llama San Pedro, tiene una población limitada. Sus padres siempre le educaron en la fe. Su madre, la primera hija que tuvo complicaciones y a pesar de que los médicos le advirtieron quiso seguir aumentando la familia. Son cuatro hermanos y una hermana. 

Se mudaron a un lugar dónde no había luz eléctrica, era un lugar de selva y que había que trabajar la tierra. Aprendieron a criar animales y a vender para ayudar a la economía del lugar. “Mi padre trabajaba fuera y nosotros nos quedamos con nuestra madre para ayudar”. Aún así pudo estudiar en un colegio católico. En el colegio les hablaban de santos y como le gustaban las obras de teatro le llamaban para que participara de estas actividades. Dentro de la escuela, era un alumno destacado. le gustaba aprender las cosas de Dios. 

Vivió sus años creciendo en la fe y ya de adolescentes comenzó a participar de los retiros y las actividades juveniles. Hubo un quiebre a los 17 años. Solían juntarse para rezar pero ocurrió que su hermana decidió irse de casa para vivir con sus tías. No entendía lo que estaba ocurriendo. Se enfadó mucho con Dio y empezó a volar por libre a salir y entrar. “Viví la sexualidad de manera desordenada. Buscaba satisfacer los placeres físicos. Cuando me hablaban de Jesús lo trataba de evitar”, explica.

Un día, le invitan a acudir a una actividad para jóvenes organizada por la Renovación Carismática. “En cada prédica Dios iba tocando mi corazón”, comenta. En este espacio pudo escuchar una canción de rap y en ese momento le gustó, algo le tocó. Fue un llamado muy particular. Empezó por aprenderse canciones, y hacer covers. Tenía unos amigos que tocaban la guitarra y así se inició en el rap.  

Fue encontrando su camino, comenzó a estudiar Ciencias Religiosas. Conoció a chicos que ya estaban más avanzados en el mundo del rap.  “Comenzó rapeando en los trenes. Para poder estudiar fue realizando muchos trabajos”. Así la gente le fue conociendo y le llamaban para retiros. Durante la pandemia le entró la duda de si debía seguir adelante por ese llamado. Gracias a la iniciativa de una artista católica de Athenas, pudo llegar a financiar el lanzamiento de su primer disco. 

¡No te pierdas este precioso testimonio! Te inspirará

Puedes conocer más del trabajo de Andrés aquí: https://www.instagram.com/andrescastellano_rpr/