El 15 de agosto de 2012 me convierto en el Vaticano, en Roma mientras estaba de crucero con mis hijas pequeñas. Doy gracias a Dios por traerme ese día de vuelta a la Iglesia, y a san Juan Pablo II por no parar de buscarme hasta que me llevó a la Iglesia.
Testimonio de conversión: De la tragedia familiar a la consagración al corazón de María
Marcela Arango es de Cali, Colombia. Creció en una familia católica practicante dónde veía la presencia del...
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