Sofía y Ángel, llevan toda una vida de casados, pero la felicidad que ahora tienen no siempre ha sido así. “El matrimonio es una pasada, no sabemos el jugo que se puede sacar”, explica. Muchas personas tienen ese anhelo en el corazón, esa llamada al matrimonio, hay que creerlo como dice Ángel. 

Tanto Sofía como Ángel han sido educados en una familia católica, con un noviazgo bien construido. “Con la vida empiezan las dificultades, con el trabajo, los niños, nos metimos en una dinámica donde no pasábamos tiempo juntos”, explica Ángel. 

Ángel sentía que de alguna manera no le valoraba pero él tampoco cumplía su parte. “Esto va generando una dinámica de frustración grande, se va generando un ambiente cada vez más tenso, con la frustración que tienes porque en el fondo sabes que estás llamado a una vocación grande”, reconoce. En esta crisis, Ángel se refugiaba en el deporte y Sofía estaba enamorada del voluntariado, era donde se sentía realmente valorada. 

Una situación donde ellos no supieron al principio a donde acudir y el enemigo también se apodera de esos pensamientos. Las dudas, de si igual no era la persona adecuada con la que estar. “Yo no pensaba en separarme pero en momentos de enfado sí que sacaba esa amenaza que le decía a él”.

El matrimonio llegó a un punto límite de crisis que gracias a Dios no llegó a término. Pero a Sofía se le ocurrió la idea de viajar a Medjugorje. Él no quería ir pero finalmente reconoce a los tres días “lo mucho que me quería el Señor, cuando eres consciente de ese amor inmenso que te da, todo cambia”. Era una alegría muy grande el sentirse querido en ese momento. 

Toda esa educación católica que Ángel había tenido empezaba a encajar. “Te das cuenta que todo tenía un sentido, eso cambió mi vida, y se me quitó la idea de separarme”. A raíz de Medjugorje empezó a ir a misa diaria con Sofía. Después de Medjugorje, todo cambió para bien pero Ángel seguía sintiendo en su interior que ese matrimonio que el Señor quería para ellos no se estaba cumpliendo. “Cuando escuchaba a un sacerdote hablar sobre el matrimonio me emocionaba”, cuenta Ángel. 

¡No te pierdas el testimonio completo, te emocionará y ayudará en tu matrimonio!