La hermana Josefina Ndambuki Koki keniana es una religiosa nacida en Kenia hace 56 años. Ha sido monja Jerónima durante 30 años en España. Entró en el Monasterio de Santa Paula de Sevilla en el año 1984. A Sevilla llegó por medio de hermanas Indias, amigas de un misionero de la India que estaba en Kenya, el P. Edward C.M.I.

La hermana nació en una familia católica donde la enseñaron ya desde pequeña a ser cristiana y a seguir a Jesús. En ese ambiente de padres cristianos ya en su adolescencia fue cuando le dijo a sus padres que quería ser religiosa.

“En todo el Señor se vale de personas, de circunstancias para llamarte a la vocación a la que quiere”, explica. En el caso de la hermana, el Señor se sirvió de una religiosa del colegio donde estudiaba que siempre veía feliz y contenta en su vida. 

Eso le llamaba mucho la atención.”Eran las únicas que nos saludaban, las únicas que siempre estaban sonrientes y yo me preguntaba qué tendrán estas monjas que siempre están contentas”, recuerda. Quería ser como ellas, y ahí empezó todo. 

Pero tuvo una segunda llamada y esa fue la de cuidar a los niños y niñas desamparados concretamente a los huérfanos y especial de madres solteras. Así fue cómo llegó a Santa  Bakhita, el centro de Kenya perteneciente a la diócesis de Machakos dónde ofrecen hogar, estudios y futuro a estos niños abandonados por sus familias. Un regalo en la vocación de la hermana Josefina.

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