Diana Castro es directora de la Fundación Nuevo Amanecer. Esta mujer encontró su proyecto de vida desde la adversidad. Gracias a este episodio que conoceréis fue mejor madre, esposa y amiga. En 2008 su único hijo y más querido fue diagnosticado de leucemia. Fue el dolor más grande para unos padres. Lo que en su momento fue su peor dolor se convirtió en su principal motor. Se preguntaba el por qué le había tocado a ella. Y es que ya desde el embarazo ya tuvo complicaciones. 

Se preguntaba en qué había fallado, pero no era un por qué sino un para qué lo que realmente buscaba. Se encontró una serie de ángeles que le hicieron saber que sí se podía llevar este proceso desde la fe. “Sabes que Dios está presente pero fue un proceso muy complicado, el del tratamiento”. Su hijo empezó con unas fiebres muy altas y dolores abdominales y en las piernas. Tras el aspirado de médula ingresó a la UCI directamente. Fue duro ver cómo otros niños que estaban en la habitación con él se iban apagando. 

“No hacía más que llorar, no sabía cómo iba a hacer. Un día me dijo mi hijo que estaba muy fea llorando”, recuerda. Desde ese mismo momento su chip cambió totalmente. Empezó a ver cómo todo empezó a fluir de diferente manera. “El día que le hicieron la primera transfusión recuerdo estar bendiciendo cada gota de sangre que entraba en su cuerpo”. Durante dos años y medio estuvieron en tratamiento. Su hijo estuvo bien durante todo su proceso, nunca se le infectó su catéter. En esa época, Diana trabajaba y dejó el trabajo para dedicarse plenamente a su hijo. 

En este camino eran 35 padres y sólo cinco familias se podían permitir estos tratamientos. “Era difícil ver cómo mientras nosotros teníamos los medios otros no podían asumirlo”.  Los cinco padres se unieron para asumir el coste del resto de familias. Hizo una amistad con una de las madres. “Su hijo se hizo el mejor amigo de mi hijo. Arrancamos la fundación juntas. Nace de ese sentimiento tan sentido y profundo que vivimos”, sostiene. Así, nace la fundación en 2009. Fue un momento muy emotivo y feliz el inicio de esta estructura. “Le pedí a Dios que me dijera qué nombre quería para la fundación”.En el año 2012 el hijo de la amiga de Diana muere. No reaccionó bien al trasplante. Fue un proceso duro tanto para Diana como para su hijo. 

¡No te pierdas este valioso testimonio, te emocionará, te cuestionará!

Puedes seguir y colaborar con la Fundación Nuevo Amanecer aquí: https://www.instagram.com/f.unnuevoamanecer?igsh=MXhiYjYxY2VjaTgzcg==