San Gennaro dice que sí. Este 19 de septiembre de 2022 se repitió el milagro de la licuefacción de la sangre del patrón, guardada en la ampolla. A las 9:26 de la mañana, haciendo girar la ampolla, el arzobispo Battaglia anunció a los fieles en una catedral de Nápoles absolutamente repleta: «La señal de la sangre una vez más».

La licuefacción parecía haberse producido ya en el momento de abrir la caja del Tesoro de San Gennaro, cuando el obispo tomó la ampolla para llevarla al altar.

El prodigioso evento tiene lugar tres veces al año: en la festividad de San Genaro, el sábado anterior al primer domingo de mayo para conmemorar el traslado de los restos del santo y, finalmente, el 16 de diciembre, en memoria de la erupción del Vesubio de 1631. Cuando la sangre no se licúa los napolitanos interpretan el prodigio fallido como un mal augurio.