María Valentina se encontraba en un momento de su vida dónde sentía que debía hacer algo por el Señor, justo cuando desde el Rosario de las 11 pm le pedimos dar testimonio. En esta etapa de su vida siente un momento de desolación cómo así lo definía San Ignacio de Loyola. Nacida en Venezuela en una familia católica tradicional, en este país hay que decir que hay una gran mayoría de personas con mucha fe católica. “Siempre con un sentido de lo que es Dios y siempre tuve muy presente a la Virgen.  Antes de nacer ya me había consagrado a la Virgen”. Su madre consagró ese embarazo a nuestra Madre. Tuvo una infancia muy feliz, a los 6 años se mudaron a una parte de Venezuela cerca del mar. Cuando empieza la adolescencia se empieza a hacer preguntas y es ahí dónde se da cuenta que quiere estudiar periodismo, comunicación. Dios siempre estuvo muy presente en su familia. En los países de Latinoamérica hay una tendencia muy grande al alcohol, a la fiesta. Y es que, todavía no había tenido un encuentro personal con el Señor. Buscaba al Señor en lugares equivocados. 

No había experimentado su amor ni lo había conocido. “Leía todo lo que caía en mis manos, leía Harry Potter, 50 sombras de Grey. Me estaba guiando por otro camino que no era el que el Señor quería para mí”, reconoce. Empieza esa sed de búsqueda de sentido de la vida. Tenía 21 años y su abuela le invita a un retiro de Cursillos de Cristiandad. Viajó a la capital. Entró un jueves y salió un domingo. “Teníamos el hábito de tomar y hacer fiesta. Cuando volví del retiro no quería ver a nadie, quería estar en recogimiento no quería beber ni salir”. Decide salir a Miami, estuvo tres meses y no se adaptó al país. Regresa y le empieza a ir bien en su trabajo. Trabaja en el sector de los eventos. En 2013 empieza la situación más grave en su país. Ese año viajó a Europa y a París, un viaje que le hacía mucha ilusión. Recuerda ese año porque una persona muy conocida de Venezuela la asesinan. “Pensé que eso mismo me podía suceder a mí”. Ahí le vino otra vez a su mente el irse del país. En 2014 vuelve a Miami. Comienza un camino duro de migración. Su familia se quedaba en Venezuela. 

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