¡ORACIÓN DEL DETENTE!

  Ábreme, oh buen Jesús, tu Sagrado Corazón, muéstrame sus encantos, úneme a Él para siempre. Que todas las respiraciones y palpitaciones de mi pobre corazón aún cuando esté durmiendo, te sirvan de testimonio de mi amor y te digan sin cesar: Señor, te amo. y te...