El 22 de febrero se estrenó el tráiler del film “El exorcista del Papa”, la esperada película basada en la historia del célebre sacerdote Gabriele Amorth y que estará en los cines a partir del 14 de abril. Sin embargo, varias personas en las redes sociales expresaron su crítica al tráiler porque consideran que no representa fielmente el ministerio de un exorcista.
La película “El exorcista del Papa” que dice basarse en la historia del padre Gabriele Amorth es interpretada por el actor Russel Crowe y dirigida por Julius Avery, director y guionista australiano. El célebre sacerdote italiano, quien falleció en 2016 a los 91 años, realizó aproximadamente 100,000 exorcismos y fue autor de diversas obras basadas en su experiencia como exorcista.
Según informa Sony Pictures al promocionar el tráiler en su cuenta de Twitter, la película está “inspirada en la historia real del Padre Gabriele Amorth, Exorcista Jefe del Vaticano“. No obstante, un sacerdote expresó su desacuerdo sobre la forma en que se representa el ministerio del exorcista en este avance del film. El padre John S. Hogan expresó en un tweet: “La mayoría de las películas de exorcistas decepcionan, hasta ahora solo ‘El Exorcista’ de Friedkin se sostiene, en su mayor parte. Mirando este avance, esta última oferta no se ve muy bien como una película de terror, y mucho menos como una representación medio creíble del ministerio de un exorcista. Ya veremos”.
Otra usuaria comentó: “He leído los libros del padre Amorth, que son desgarradores, pero siempre te devuelven a la misericordia de Dios. También son un medio para mostrar que Dios existe por las manifestaciones muy reales del enemigo de Dios. Pero este tráiler parece basura para ser franco”.
El padre Gabriele Amorth nació en Módena, Italia, el 1 de mayo de 1925, ingresó a la casa matriz de la Congregación de la Sociedad de San Pablo en agosto de 1947 y fue ordenado sacerdote el 24 de enero de 1951. Su ministerio de exorcista comenzó muchos años después, en 1986, cuando fue nombrado por el cardenal Ugo Poletti, vicario general de la diócesis de Roma.
Siempre que podía, el padre Gabriele Amorth recordaba la importancia que los exorcistas en un mundo cada vez más alejado de la fe.
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