Se trata de un arbusto en la Iglesia de la Santa Cruz de Querétaro, en México. Las espinas en forma de cruz desafían a los científicos y a los fieles.

El lugar donde está ubicado el árbol tiene una larga historia. Según la tradición popular católica, en ese mismo espacio ocurrió una terrible batalla entre españoles e indígenas en donde los conquistadores obtuvieron un triunfo. Según se ha podido conocer de los testimonios que narrados, gracias a la aparición de una gran cruz en el cielo, los chichimecas desistieron de seguir luchando. En honor a ese episodio, a fines del siglo XVII, los conquistadores erigieron una iglesia con convento a la que bautizaron con el nombre de “la Santa Cruz”.

Más allá de las leyendas, en este mismo espacio se estableció el primer Colegio para misioneros de América, también conocido como de Propaganda Fide, del que salieron algunos de los evangelizadores más importantes de México. Entre ellos se encontró el conocido San Junípero Serra, quien estableció varias misiones para cristianizar a los nativos.

La versión tradicional cuenta que el venerable Antonio Márgil de Jesús arribó a esta iglesia hacia fines del siglo XVII. Según parece, al llegar al lugar, cansado de sus viajes por Sudamérica, fray Antonio clavó su bastón en la huerta del convento y lo abandonó allí.

¡No te pierdas la historia completa!